Cuando se produce un despido laboral, varias son las circunstancias que se deben tener en cuenta.
Tal y como expone el Estatuto de los Trabajadores, todo despido debe cumplir con una serie de requisitos. En caso contrario, el despido será defectuoso y puede ser calificado de improcedente, con las consecuencias que ello implica.
En este post, te explicaré de manera sencilla cuales son los 5 errores que se dan con más frecuencia.
DESPIDO LABORAL SIN «CARTA DE DESPIDO»
Resulta fundamental que, en toda extinción del contrato por voluntad del empresario, al trabajador se le haga entrega de la -popularmente conocida como- carta de despido.
De esta manera, el trabajador recibe, en el momento en que el empresario comunica el despido, un documento escrito en el que se le informa tanto del despido en sí (con la fecha en la que produce efectos), como de las causas por las que se le despide.
En caso de que esta carta no se entregue, estaremos ante un despido improcedente.
CARTA DE DESPIDO SIN HECHOS
Es bastante habitual ver cartas de despido en las que no se exponen los hechos que fundamentan la decisión empresarial.
En este sentido, puede suceder que la carta simplemente se ciña a mencionar el artículo del Estatuto de los Trabajadores o del Convenio Colectivo en el que se basa, sin realizar ninguna relación de éste con el hecho realizado por el trabajador. Así pues, la carta podría mencionar un artículo normativo y hacer referencia a que en base en él se le despide, sin poner en relación éste con una descripción detallada de las acciones del trabajador.
Por esta razón, si al leer la carta de despido tienes la sensación de que no te explican con exactitud qué has hecho, lo ideal sería que solicites asesoramiento.
CARTA DE DESPIDO CON HECHOS O CAUSAS FALSAS
Como se expuso anteriormente, la carta de despido debe consignar de manera detallada y específica las causas que lo justifican.
Por el contrario, no es extraño que la empresa consigne causas falsas. En esta línea, se suelen utilizar los despidos por «causas económicas», por «bajada del rendimiento», o por «amortización del puesto de trabajo» como principales causas falsas.
En los casos anteriormente expuestos -que se mencionan a modo de ejemplo, sin ser los únicos- la falsedad se produce en dos casos. O bien el trabajador es consciente de que no es cierta la causa, o bien no se argumenta ni prueban los hechos de manera clara.
CAUSAS DE DESPIDO LABORAL DESPROPORCIONADA
Se suele decir en derecho que no se puede matar una mosca a cañonazos. De igual manera, el despido laboral debe ser la última de las opciones para el empresario.
Así pues, y a modo de ejemplo, en caso de despido disciplinario este se puede dar únicamente en caso de faltas muy graves y siempre que no quepan atenuantes (cuestiones que reduzcan la sanción). Por su parte, si el despido se produce por amortización del puesto de trabajo o causas económicas, debe ser éste (el despido) la única alternativa, no siendo posible la reducción de jornada u otras variantes.
PRUEBA NULA
La causas que justifican el despido deben ser probadas. Y dichas pruebas, deben ser legales.
En referencia a lo anterior, si una prueba de obtuvo de manera ilegal o vulnerando derechos del trabajador, esta pasa a ser nula. Consecuentemente, al ser la prueba nula, el despido pasa a carecer de pruebas y ser improcedente.